“...recursos intangibles,
como cultura, conocimiento,
experiencia, nuevas
tecnologías son
infinitos, renovables y
pueden representar una
economía de abundancia,
basada en modelos de
colaboración.”
Airbnb, por ejemplo, es un servicio online comunitario
para que la gente anuncie, descubra y reserve lugares.
Por su parte, Netflix ofrece servicio de TV por internet
a más de 70 millones de abonados. Spotify es un
servicio que ofrece millones de músicas en streaming.
ZipCar es un servicio para compartir automóviles, y
el eBay, un sitio de comercialización de productos
nuevos y usados, con más de 159 millones de usuarios
activos y 291 downloads de su aplicación para
aparatos móviles, como tablets y celulares.
Para Lala Deheinzelin, especialista internacional
en economía creativa, sostenibilidad y futuros y
directora de Enthusiasmo Cultural , “durante siglos,
la sociedad, la economía y la política se organizaron
exclusivamente en torno de los recursos materiales,
como tierra, oro o petróleo, que, por ser tangibles,
se consumen con el uso y son finitos. Y esa calidad
de finito creó una economía de la escasez, basada en
modelos de competición. No obstante, los recursos
intangibles, como la cultura, el conocimiento, la
experiencia, las nuevas tecnologías son infinitos,
renovables y pueden representar una economía de la
abundancia, basada en modelos de colaboración”.
El vicecoordinador de GVces (Centro de Estudios
de Sostenibilidad de la Fundación Getulio Vargas),
el administrador y consultor Paulo Durval Branco,
afirmó a la Revista LANXESS que las nuevas formas
de economía, con diferentes nomenclaturas –como
de Ruptura, Compartida y Colaborativa, Circular,
Propósito y Creativa– fueron creadas en torno
de ideas centrales. “Ellas tienen por detrás una
aspiración, a veces consciente, a veces inconsciente,
de llevar bienestar a la posteridad, en un planeta con
recursos finitos”. Branco advierte, sin embargo, que
algunas personas tienen consciencia de ello, y otras
no. “Lo que existe es un deseo en ese sentido”.
Y va más allá diciendo que, en la perspectiva B2B, la
economía circular incluye un abordaje central en ese
debate. Una economía más circular, más responsable, en
el trato de residuos, por ejemplo, trae la noción de que
para unos los residuos son basura, para otros, materiales
reciclables. “Iniciativas prometedoras, esas nuevas formas
Hospedaje en más
de 40 mil ciudades de
más de 160 paises
70 millones de
suscriptores
+20 millones
de suscriptores
159 millones de
usuarios activos
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