Military Review Edición Hispano-americana Noviembre-Diciembre 2013 | Page 36

procesos invaden el entrenamiento del “Gran Ejército”. El Sistema Digital de Administración de Entrenamiento permite que todo líder observe y critique el itinerario de entrenamiento desde un lugar remoto —o se presente para verificar si se adhiere al mismo. A las unidades se les asignan “tareas esenciales de misión” las cuales están divididas en “tareas colectivas”, que a su vez prescriben tareas de apoyo, condiciones y estándares. Todos los Manuales de campaña, las Publicaciones de doctrina del Ejército, las Publicaciones de tácticas del Ejército, las Publicaciones de entrenamiento de soldados, los Boletines de entrenamiento y las normas operacionales contienen rúbricas en las que se explica cómo resolver problemas específicos.43 El entrenamiento se completa cuando una unidad lleva a cabo las acciones requeridas en el orden exigido. Si el aprendiz omite un paso o descubre otra solución, se requiere que vuelva a reentrenarse. Al concentrarse en las respuestas de comportamiento automáticas a estímulos específicos y en los procesos en lugar de los resultados, nuestro Ejército perpetúa un patrón de nuestro pasado, cuando las guerras de mayor envergadura principalmente se luchaban con conscriptos que no contaban con el