Military Review Edición Hispano-americana Marzo-Abril 2014 | Page 76
Siria. En este punto, cabe recordar que la misión
(y responsabilidad) del Departamento de Estado
es emplear la diplomacia para “crear un mundo
más seguro, democrático y próspero para el beneficio del pueblo estadounidense y la comunidad
internacional”.4 El Departamento de Estado usa
los siguientes principios subyacentes para guiar
su metodología a fin de cumplir la misión:
En primer lugar, se centra en formar y sostener relaciones bilaterales y multilaterales con
socios e instituciones internacionales.
En segundo lugar, se esfuerza por proteger a
la Nación contra amenazas transnacionales tales
como el terrorismo, pobreza y enfermedades.
En último lugar, pretenden fomentar un
mundo más democrático y próspero integrado a
la economía global.
Nuevamente, el Departamento de Estado usa
el elemento diplomático del poder nacional para
lograr las metas de política exterior y seguridad
nacional estadounidense.
En el caso de Siria, la diplomacia apoya los
sueños del “pueblo sirio de una transición dirigida
por sirios a una Siria democrática, inclusiva y unificada”.5 Esta misión ha sido extraordinariamente
difícil de cumplir en medio de una guerra civil y
el desafío fue exacerbado por la decisión de EUA
de cerrar su embajada en Damasco en febrero de
2012. Hoy en día, los diplomáticos estadounidenses tienen que trabajar con y a través de socios
internacionales para establecer las condiciones
par