Literatura BDSM El Límite del Placer ( Eve Berlín ) | Page 216

—Había funcionado bien hasta ahora. Mischa hizo una breve pausa, antes de preguntar tranquilamente: —¿De verdad? Dylan soltó un resuello. —Quizá. No lo sé. Dios, quizá no. Porque hasta que te conocí hace un par de años, no había tenido ningún amigo de verdad. Ni tan solo cuando era una niña. Estaba demasiado ocupada cuidando de mi madre y de mi hermana. Y demasiado avergonzada por Darcy. Mi situación. Entonces, te conocí y… qué triste es haber tenido que esperar tanto para tener una amiga. Y ahora, sigo teniéndote solo a ti. Y eso nunca había sido un problema hasta ahora. Nunca me había dado cuenta de que necesitaba a… alguien. —Tienes a otros amigos escritores. Conociste a C. J. y a Jade en la misma conferencia en la que me conociste a mí. —No soy tan íntima de ellos. —Creo que a ellos les gustaría serlo, si les dejaras acercarse a ti. Sé que lo harían. Y, Dylan, el hecho de que ahora tengas a gente en tu vida es diferente, tal y como has dicho. El hecho de que lo quieras. Demuestra cambio. Crecimiento. No te agarres al pasado. Concéntrate en lo que ahora ocurre. En quién te has convertido. —Ya no sé quién soy. No soy esa persona débil… —¿Por qué crees que eres débil? —Porque… porque me he permitido quererle. Las lágrimas se convirtieron en fuertes sollozos y pasaron unos momentos antes de que ella pudiera contenerlas. Mischa dijo amablemente: —Dylan, no sé cómo has llegado tan lejos en tu carrera como escritora, escribiendo sobre relaciones tanto como lo haces con el sexo y aún creyendo que amar a alguien es un signo de debilidad. Sencillamente, es algo que hacemos. Es parte de la condición humana. El amor no es algo sobre lo que tengas ningún control. A estas alturas, ya lo deberías saber. —Lo sé. Por eso me resulta tan horrible. —Bienvenida a la raza humana, cariño —dijo Mischa, pero no había nada de