Literatura BDSM El Límite del Placer ( Eve Berlín ) | Page 135

músculos, la tentación de simplemente relajarse con él. Dylan llenó la tetera y la puso al fuego, antes de sacar el té y las tazas de los armarios de arce para distraerse. —Es un piso fantástico —dijo finalmente él. —¿Te gusta? Es tan diferente a tu casa. —Quieres decir que mi casa es un caos. —No, para nada. Es confortable. Acogedora. —Pero no es un piso de dise ;