EL DESVÁN DE LA POESÍA | Page 3

VAGAMUNDO

Y sin darnos cuenta,nuestra vida nos apuñaló.

Mi cielo se llenó de nubes negras,

te buscaba entre la soledad de las calles,

te buscaba en las noches más frías.

Conmigo iluminabas las ventanas del alma,

ahora me refugio en las horas de reloj.

Éramos como sístole y diástole, como uña y carne.

Tengo guardados en las entrañas los abrazos del pasado,

las copas llenas de risa.

Pero llegó el momento de volvernos a ver,

y mi vida volvió a sonreír,

ya no seré un VAGAMUNDO

y tú tampoco.

Alba Pérez

Hugo Martín

Elsa Lafuente

Jorge Aguinaga

Álvaro Bellido