Carta de Presentación para quienes quieren educar en el amor
Queridos padres:
El desarrollo pleno de los hijos es la aspiración más noble que se plantean los padres
como primeros y principales educadores. Ellos, a partir del amor incondicional, no sólo dan vida
sino que la cultivan día a día con la educación, dejando así una profunda huella en la personalidad
de los hijos.
El desarrollo y cuidado físico, afectivo, espiritual y socio-cultural son vitales
para la formación integral de una persona.
La cultura presenta cambios profundos y vertiginosos. Es necesario estar preparados
para responder a los nuevos desafíos que plantea el momento actual.
Hoy, las nuevas generaciones reciben información de distintas corrientes.
Todo está a disposición en internet y en los medios de comunicación masiva.
Y, sin embargo, esa información no alcanza para disminuir algunos de los riesgos que las amenazan:
dificultad para elaborar un proyecto de vida, inmadurez afectiva, iniciación sexual precoz,
enfermedades...
La educación integral de la sexualidad va más allá de la transmisión de saberes.
Consiste en enseñar a amar. Lo que el niño aprenda en su hogar, luego lo vivirá en la sociedad.
Educar hoy no es sencillo. A partir de estas líneas, queremos ofrecerles algunos recursos
prácticos para facilitar la tarea de orientar y educar a sus hijos con optimismo y serenidad.
Queremos llegar a todas las familias, a las que quieren ser felices, a las que luchan y trabajan
por lo mejor que les ha dado la vida: los hijos. Los Autores
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